El plástico es un elemento presente y en muchas ocasiones imprescindible en nuestra vida.
Lo encontramos en todas partes: envases, vehículos, decoración, tecnología, cosmética, textiles…
Renunciar a él es imposible, pero reducir su consumo si es posible y más sencillo de lo que parece, solo requiere de un cambio de hábitos y de mentalidad.
Un pequeño cambio por parte de todos logrará reducir el impacto medioambiental.
Te ayudamos a ser más sostenible, a reducir plásticos sin darnos cuenta
Comprar productos concentrados es una gran decisión, con esta acción cuidarás del medio ambiente.
Evolucionamos hacia una mayor sostenibilidad, trabajando para reducir nuestra huella de carbono.
En nuestra actividad, como fabricantes de productos químicos, los envases de plástico son imprescindibles e insustituibles en la mayoría de referencias por seguridad.
Nuestro compromiso con el Medio Ambiente, se refleja en nuestras fabricaciones y en el suministro de productos:
¿Cómo reducimos el uso de plástico?
Evitando que sea de corta duración.
Cada año se producen 500.000 millones de botellas de plástico en el mundo.
Nuestra arma más poderosa, fabricar productos altamente concentrados.
Trabajamos con fórmulas que obtengan como resultado un producto duradero, evitando necesitar grandes dosis o dosis continuas de producto.
De esta manera, el contenido del envase será de larga duración y la producción de envases se reduciría en beneficio de todos.
Como fabricantes ponemos a disposición del cliente productos de alto rendimiento así como todo tipo de accesorios necesario para las realizar las diluciones.
En marzo de 2017 la Organización de Consumidores, OCU, realizó un estudio comparativo entre más de 20 marcas, con certificación ecológica y sin ella, y concluyó que la producción de fórmulas concentradas era la asignatura pendiente de todos los fabricantes analizados. Y no solo eso, en la mayoría de los casos la proporción de envase vacío en relación al contenido era escandalosa.
El uso de productos concentrados es: rentable, sano, seguro, cómodo.
Rentable: Se optimiza el 100% del producto, sin desaprovechar nada.
Cómodo: Los productos concentrados permiten disponer de mayor espacio libre.
Sano: La adquisición de productos concentrado también reduce las emisiones de CO2, debido a que la necesidad de adquirir y transportar nueva mercancía será más espaciada en el tiempo.
Seguro: Reduce el riesgo de accidentes laborales gracias a que solo se necesita cargar el peso de la materia activa que luego se diluirá en agua.
Con los productos concentrados se reduce el plástico.
Un buen hábito para cuidar del planeta
